Un segundo encuentro es la última parte de las Misiones de Arconte del Prólogo: Acto II.
Detalles[]
- Dirígete al Acantilado Estrellado
- Habla con Venti
Diálogos[]
- (Dirígete al Acantilado Estrellado)
- Diluc: Ya estamos todos aquí.
- Paimon: ¡Qué vista tan increíble!
- Venti: Ideal para una reunión con el destino, ¿no es así?
- Venti: Bueno, hay que prepararnos para la pelea.
- Jean: Pase lo que pase, parece que las cosas han mejorado un poco.
- Jean: Mondstadt ha sufrido mucho recientemente.
- Diluc: ¿Quién hubiera dicho que, al final, la solución a nuestro problema sería simplemente un viajero y una canción?
- Diluc: Admito que los Caballeros de Favonius también pusieron de su parte.
- Venti: Lo entendemos, Sr. Diluc... En fin, todo el mundo, háganse a un lado.
- Venti: Yo, el mejor bardo del mundo terrenal, comenzaré a tocar la Lira Sagrada
- Justo en el momento clave de su conversación con Dvalin, apareció un Mago del Abismo que lo engañó con un hechizo. Cegado por el odio, Dvalin se alejó volando...
- Jean: Barbat... Venti, ten cuidado.
- Venti: ¡Jaja! Hace tiempo que conoces mi verdadera identidad, ¿cierto, Jean?
- Venti: Pero te agradezco que me sigas llamando Venti.
- Diluc: ¿Cómo está la Lira Sagrada?
- Diluc: ¿Aún puedes tocarla, o tenemos que arreglarla?
- Venti: Humm...
- Venti: Por desgracia, me temo que es imposible arreglarla...
¡No podemos dejar que el Mago del Abismo se salga con la suya!
- Diluc: Así es. Si no arrancamos el mal de raíz, no podremos salvar a Dvalin.
- Dvalin corre un grave peligro...
- Diluc: Primero, debemos hacer que el Mago del Abismo pague por lo que ha hecho.
- Diluc: Si no arrancamos el mal de raíz, no podremos salvar a Dvalin.
- Jean: En cuyo caso recurriré a Amber para localizarlo...
- Diluc: No hace falta.
- Jean: ¿Cómo?
- Diluc: Hace poco, me deshice de un Mago del Abismo en uno de los Templos de los Cuatro Vientos.
- Paimon: ¡¿Qué?! ¿Cuándo?
- Diluc: Si quieren rastrear a esos monstruos, preguntaré a mis contactos. Puedo hacer el trabajo por otros medios.
- Paimon: Diluc...
- Paimon: Aunque no le agradan los Caballeros de Favonius, tiene sus propios métodos para proteger Mondstadt.
- Venti: Vaya, la pequeña Paimon se volvió muy comprensiva de repente.
- Diluc: ¡Hum!
- Diluc: Estén atentos a mis noticias.
- Diluc: Que la Orden del Abismo sepa que su desprecio a Mondstadt
- Diluc: no quedará sin castigo.