Crítica: Under the Sky of Damascus
por Vladan Petkovic
- BERLINALE 2023: La producción de la película de Heba Khaled, Talal Derki y Ali Wajeeh padeció precisamente el problema del que trata, pero sigue suponiendo un símbolo de esperanza ante la adversidad
Son muchas las películas que se encuentran con complicaciones de producción por el camino, pero lo que Under the Sky of Damascus [+lee también:
tráiler
ficha de la película], la nueva película de los exiliados sirios Heba Khaled y su socio Talal Derki (Of Fathers and Sons [+lee también:
crítica
tráiler
ficha de la película]), residentes en Berlín, y Ali Wajeed, residente en Damasco, consigue y no consigue al mismo tiempo es un doloroso ejemplo de cómo un documental puede padecer precisamente el problema del que trata. La película se ha estrenado a nivel mundial en la sección Panorama de la Berlinale.
Guiada por la voz en off de Khaled, la película trata sobre un grupo de mujeres de Damasco que trabajan en una obra de teatro sobre la misoginia en la sociedad siria, que no ha hecho más que exacerbarse con la guerra. De hecho, ahora, un número todavía menor de hombres domina sobre la gran mayoría femenina que queda en el país.
Farah y Souhir parecen llevar la voz cantante del grupo de cinco cultas mujeres de clase media que deciden empezar a trabajar en la obra en una casa abandonada que alquilan y que, aunque ahora se encuentra en ruinas, seguro que en su momento fue hermosa. Estas secuencias se alternan con entrevistas a mujeres que comparten su sufrimiento a manos de los hombres —maridos, padres, hermanos, primos— en los que basan la obra.
Una de estas mujeres es Sabah Al-Salem, que en su día fue una actriz famosa y que permaneció también varios años en prisión. A ella la filman en un apartamento, mientras que a otras víctimas las entrevistan en lugares como una fábrica textil o un hospital psiquiátrico. Sus historias son espeluznantes, y sus rostros y lágrimas todavía más reveladores, pero lo que verdaderamente se pone de manifiesto es que a muchas de estas mujeres les queda poco o nada que perder, y otras muchas se sienten demasiado intimidadas para hablar ante la cámara, aunque se las filme en la sombra, tal y como pidieron ser entrevistadas algunas de las trabajadoras de la fábrica textil.
Al mismo tiempo, se muestra a Ilana en una discusión con sus padres antes de tomar la decisión de mudarse, y es que este es uno de esos desacuerdos políticos que pueden hacer que las familias dejen de hablarse. Al final acaba por no ser el caso, pero nos da una idea del panorama más amplio de la sociedad.
A pesar de las diferencias artísticas, el grupo siempre sigue adelante, hasta que, de repente, Eliana envía un extraño mensaje de voz en el que dice que no puede continuar. Las mujeres, que intuyen que algo no va bien porque saben que este tipo de comportamiento no es propio de su amiga, viajan a Beirut para reunirse con Khaled. Y es a través de las entrevistas con Ilana y Eliana cómo nos enteramos de por qué se ha tenido que detener la producción, pero sería un spoiler revelar la parte más interesante de la película, así que solo revelaremos que se trata de algo que está directamente relacionado con el mismo tema que explora su obra.
Es una pena que los codirectores decidieran no profundizar en este aspecto, ya que revela aún más lo profundamente arraigada que está la misoginia a esta sociedad, pero esta observación debe interpretarse teniendo en cuenta el contexto. Algunos fragmentos de esta historia se muestran en la película, lo que a su vez significa que posiblemente hubo muchos más detalles que no se pudieron mostrar debido a una pesadilla logística y a delicadas disputas interpersonales.
Estas mismas cuestiones podrían ser también la causa de que las entrevistas a las mujeres maltratadas parezcan más una recopilación de testimonios devastadores que un conjunto conciso, lo que hace que la experiencia de visionado resulte un tanto desalentadora a pesar de su naturaleza estremecedora. Aun así, el documental rebosa fuerza y sensibilidad. Por un lado, a los espectadores les costará borrar de sus mentes las historias de algunas de las mujeres entrevistadas, pero por otro lado, la poderosa presencia de las protagonistas da motivos para la esperanza a pesar del destino tanto de esta película como de la obra de teatro en la que trabajaban.
Under the Sky of Damascus es una coproducción entre la danesa Real Lava y la alemana Jouzour Film. Submarine Entertainment posee los derechos internacionales.
(Traducción del inglés)
¿Te ha gustado este artículo? Suscríbete a nuestra newsletter y recibe más artículos como este directamente en tu email.