Star Wars: The Old Republic: Revan es la tercera de una serie de novelas basadas en el juego de MMORPG Star Wars: The Old Republic. Publicada el 15 de noviembre de 2011, la novela fue escrita por Drew Karpyshyn. Del Rey reveló el libro en la Celebration V y el sitio web de The Old Republic reveló el nombre el 22 de abril de 2011.[1]
Sinopsis[]
Tapa trasera:
Hay algo allá afuera: un gigante de maldad dispuesto a destruir a la República — a menos que un único Jedi, rechazado y despreciado, pueda detenerlo.
Doblez interior:
Revan: héroe, traidor, conquistador, villano, salvador. Un Jedi que dejó Coruscant para derrotar a los Mandalorianos — y volvió como discípulo del lado oscuro, empeñado en destruir a la República. El Consejo Jedi le regresó a Revan su vida, pero el precio de la redención fue alto. Sus recuerdos han sido borrados. Todo lo que queda son pesadillas — y un miedo profundo y permanente.
¿Qué ocurrió exactamente más allá del Borde Exterior? Revan no puede recordarlo, y sin embargo, no puede olvidarlo del todo. De alguna manera se topó con un terrible secreto que amenaza la existencia misma de la República. Sin tener idea de lo que es, o cómo detenerlo, Revan podría fallar, porque nunca se ha enfrentado a un enemigo tan poderoso y diabólico. Sin embargo, sólo la muerte puede impedirle de intentarlo.
Resumen[]
La historia transcurre dos años después de los hechos de Star Star Wars: Caballeros de la Antigua República.Revan, casado con Bastila Shan y fuera de la Orden Jedi, comienza a tener pesadillas sobre su pasado como Lord Sith, las cuales le advierten de una gran amenaza para la Republica. Desesperado por encontrar más información sobre su pasado, decide buscar ayuda en su fiel amiga y antigua General Meetra Surik (La Exiliada, protagonista de Star Wars: Caballeros de la Antigua República II: Los Señores Sith ) pero se encuentra que ha sido expulsada de La Orden y fuera del espacio de la República. Necesitado de ayuda, decide contacta con su viejo amigo Canderous Ordo. Tras unas breves investigaciones, Ordo, descubre que un grupo de mandalorianos, están buscando la Máscara de Mandalore, el símbolo de su pueblo. Esto despierta en Revan nuevos recuerdos. La máscara fue robada por él, después de matar a Mandalore y escondida en un remoto planeta para romper la moral de los mandalorianos y evitar así su reagrupamiento. Antes de partir en la búsqueda de este símbolo, Revan conoce que Bastila está embarazada y a pesar de las protestas de ella, el Jedi consigue convencerla de que se quede en Coruscant para no poner en peligro la vida de su futuro hijo.
Mientras tanto, en Dromund Kaas fuera del espacio conocido de la República, el Imperio Sith ha sido reconstruido tras haber sido expulsado de las regiones conocidas de la galaxia, miles de años atrás. Un Lord Sith, conocido como Lord Scourge es asignado por el Emperador (link) para proteger a la miembro del Consejo Oscuro Darth Nyriss, de los traidores que tratan de acabar con su vida.
Tras ganarse la confianza de su señora, Nyriss cuenta a Scourge los planes para acabar con la vida del Emperador. Para convencerle de que debe de ser detenido, le lleva hasta el planeta de Nathema. Cuando aterrizan, se encuentran en un planeta carente de vida, color o sensaciones, un planeta que ha sido despojado de La Fuerza. Nyriss le explica que mil años antes, un joven mató a sus padres mediante el uso de la fuerza convirtiéndose así en un Sith. Pasó varios años aprendiendo sobre los secretos del Lado Oscuro, mientras que el resto de Señores se mataban entre ellos. Finalmente, se convirtió en el Sith más poderoso del planeta (bajo el nombre de Lord Vitiate) y convocó una reunión de todos los Lores Sith del imperio. Está reunión fue una trampa. Lord Vitiate absorbió la Fuerza de Los Lores Sith pero no se detuvo: fue absorbiendo más y más hasta consumir toda la del planeta. Nada sobrevivió. Este ritual, le permitió alcanzar la inmortalidad y asumir el puesto de Emperador. Nyriss le dice entontes a Scourge, que su locura no tiene límites y que planea atacar de nuevo la República, lo que seguramente conducirá a los Sith a su extinción.
Tras recuperar la Máscara de Mandalore y gracias a una grabación encontrada junto con la máscara, Revan descubre la existencia de Nathema. Dejando atrás a su amigo Canderous, convertido en el nuevo Mandalore, parte junto con T3-M4 a bordo del Halcón de Ébano.
Llegando al planeta, la nave de Revan es derribada y queda inconsciente. Nyriss y Scourge, le toman como prisionero. Tras perder a su dueño, T3-M4 repara el Halcón del Ébano y vuelve al espacio de la República, donde se encuentra con Meetra Surik Los hechos posteriores son narrados en Star Wars: Caballeros de la Antigua República II: Los Señores Sith.
Cuatro años después de las Guerras Oscuras contadas en Star Wars: Caballeros de la Antigua República II: Los Señores Sith, T3-M4 vuelve con Bastila y la informa de la desaparición de Revan. A pesar de los celos que siente por la relación de Meetra con Revan, Bastila se alegra al saber que piensa ir a rescatarle y da a Meetra la máscara de Revan que había mantenido oculta. Junto con T3-M4 parte rumbo al planeta de Nathema donde tras buscar en los archivos municipales, descubre el planeta de Dromund Kaas, partiendo de inmediato hacia allí.
Haciéndose pasar por mercenaria, encuentra a Scourge, quien tras hablar con Revan y haber visto el horror de Nathema, decide aliarse con la Jedi para detener el peligro que supone para todos el emperador.
Juntos preparan una trampa a Nyriss, mostrando al Emperador los datos sobre la conspiración para acabar con su vida. El Emperador manda a la Guardia Imperial el ataque a la fortaleza de Darth Nyriss así como su muerte, momento que aprovechan Scourge y Meetra para rescatar a Revan. Al ver su antigua máscara, cuenta a sus rescatadores que él y Malak fueron hace años a ese planeta a acabar con la amenaza que suponía el Emperador. No tuvieron oportunidad contra su enorme poder, y sus mentes fueron corrompidas y vueltas hacia el Lado Oscuro, con la misión de atacar La República. En su huida de la fortaleza, se ven obligados a luchar con Nyriss. Revan consigue derrotarla y tas ello, se esconden en una cueva antes de asaltar el Palacio Imperial, donde ve una grabación de Bastila junto con su hijo Vaner Shan. A su vez, Scourge tiene una extraña visión sobre un Caballero Jedi luchando contra el Emperador.
Al día siguiente, lanzan su ataque contra El Palacio Imperial. El Emperador resulta ser tremendamente poderoso y Revan es derrotado antes de que Meetra y Scourge puedan ayudarle. Para salvar a Revan de su inminente muerte, T3-M4 usa su lanzallamas contra el emperador, dando a su amigo tiempo a recuperarse pero siendo castigado con su destrucción sin causar ningún daño al Lord Sith. Finalmente Meetra y Scourge se unen a Revan y se preparan para un ataque conjunto con el fin de acabar con el poderoso Sith, pero en ese momento, Scourge entiende su visión: un Jedi derrota al Emperador, pero no es ni Revan ni Meetra. Sabiendo por fin lo que debe ser hecho, clava su sable de luz en la espalda de Meetra Surik, atravesándola y matándola en el acto. Sin ayuda, Revan es derrotado fácilmente por el Emperador. Scourge logra convencer al Emperador que todo había sido una estratagema para atraer hacia él a sus enemigos y así poder derrotarlos. Como agradecimiento, Scourge recibe el regalo por parte del Emperador de la inmortalidad, que le creará para siempre un constante suplicio, y recibe el recién creado cargo de La Ira del Emperador. Junto a él, aguardará pacientemente al Jedi destinado a terminar lo que empezaron él, Revan y Meetra Surik.
Mientras tanto, Revan, inconsciente, es llevado a un lugar secreto donde permanece en éxtasis y aunque su mente es invadida continuamente por el Emperador, Revan en ese campo de batalla es mucho más fuerte que él, resistiendo todos los intentos de conocer información sobre La República. Junto a él, el espíritu de la leal Meetra Surik le acompaña, dándole fuerzas donde ningún otro puede y alimentándole de Fuerza.
El libro concluye con una envejecida Bastila manteniendo un diálogo con su hijo. Hablando sobre Revan, Vaner la pregunta que si se habría sentido defraudo por haberse dedicado a la política en vez de ingresar en la Orden Jedi. Bastila le dice que Revan habría estado orgulloso de él y que a pesar de la oscuridad, ella puede sentir que sigue vivo y que tuvo éxito en su misión de salvarles de la gran oscuridad de la que hablaba. Bastila se duerme, soñando con su desaparecido marido.