**** Adaptar obras para niños no es fácil, y muchos intentos han naufragado entre la ridiculez y la ineficacia. Por eso es tan valiosa la labor que los incansables Leonardo Reale y Juan Lavanga llevan a cabo cada año, acercando los clásicos de la danza a la audiencia menuda. En este caso, sacaron provecho de contar con dos bailarinas mellizas (las juveniles Celeste y Noelia Díaz) para recrear la magia de “Coppelia”, a casi 150 años de su estreno en París en 1870. El alcalde y la alcaldesa del pueblo son los guías de la trama, llena de fantasía, muñecos y gracia.
Como siempre, es un gran punto que sobre el escenario haya una cercanía etaria con los espectadores, lo que hace creíble la historia. Más aún si los jóvenes bailarines son tan buenos como los del Ballet Metropolitano. Las hermanas Díaz fueron además excelentes actrices; a su lado, Fabio Roblejo compuso con solvencia al perplejo Franz. El resto de la compañía lució impetuosa y comprometida, acompañada de la experiencia de Yanina Toneatto, refinada y segura. Un hallazgo la actuación de Nicolás Baroni como Coppelius, y la simpatía de los alcaldes Rodolfo Romero y Agustina Ipiña.
Sin estridencias, respetuosa de la tradición pero cercana a los códigos actuales, “Coppelia y Swanilda” es una magnífica oportunidad para que grandes y chicos disfruten del ballet.
Coppelia y Swanilda. Ballet para niños. Cor.: Leonardo Reale. Mús.: Leo Delibes. Ballet Metropolitano de Bs.As. Dir. General: Juan Lavanga y Leonardo Reale. Ciudad Cultural Konex, hasta el 14 de julio.
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